El Giardino dei Tarocchi (Jardín del Tarot) se encuentra en la soleada Toscana, en la localidad de Garavicchio y está inspirado en el Parc Güell de Barcelona (de Antoni Gaudí).
Ha sido ideado por el artista franco-estadounidense Niki de Saint Phalle, que comenzó los trabajos en 1979 y los completó en 1996.
Fue todo autofinanciado y vino a costar unos 10 millardos de las viejas liras, como unos 5.164.569 euros de ahora.
Pero los colores brillantes e intensos y el predominio del color de contrastes no sólo se inspiraron en Gaudí. A simple vista es fácil individuar las formas de Matisse, Picasso, Kandinsky y Klee.
El Giardino dei Tarocchi abrió sus puertas al público en 1998 e incluye varios senderos que se extienden por dos hectáreas, donde aparecen mensajes grabados y pensamientos con significados simbólicos y a veces esotéricos.
El portal de la entrada fue creado por el arquitecto suizo Mario Botta, en colaboración con Roberto Aureli y consiste en una larga pared de toba con una abertura circular en el centro, como para evidenciar la transición desde el mundo real al jardín de ensueño.
Caminando se tiene la impresión de sumergirse en una historia, entre esculturas ciclópeas altas entre los 12 y 15 metros: los amantes, el emperador, la templanza, las estrellas, la luna y así sucesivamente. Son todas estatuas que están fuertemente llenas de significado.
Una obra única, que une a la perfección el arte, la naturaleza y la espiritualidad.
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